Esta es la verdadera razón por la que la gente no bota la cáscara de piña

Una de las frutas que aporta gran cantidad de nutrientes es la piña, un alimento de origen vegetal de la cual hay varios tipos y se puede consumir de diferentes formas, ya sea de manera natural, preparada en jugo, o quizá en alguna ensalada.

Con un aporte importante de vitaminas y minerales, la piña es una fruta que se puede conseguir casi en cualquier parte, por lo que resulta sencillo añadirla en diversas preparaciones para obtener todos sus beneficios, sin embargo, hay algunos que las personas desconocen.

La razón por la que NO deberías botar la cáscara de piña

No es extraño que al momento de consumir piña la gente bote su cáscara sin saber que se está deshaciendo de una parte que se puede emplear en beneficio de la salud, dado que este ‘desperdicio’ es una fuente rica en colágeno, que se sabe es una proteína clave para eliminar arrugas.

Los especialistas señalan que el colágeno es la proteína más abundante en el cuerpo, funciona como una especie de sostén para la piel, de tal forma que al encontrarse en mayor porcentaje en la dermis, permite mantener la resistencia y firmeza de la piel.

La producción de colágeno comienza a disminuir a partir de los 30, bajando un pequeño porcentaje todos los años, por lo que en consecuencia la piel va perdiendo firmeza, se presenta flacidez y surgen las arrugas, es por esto que para reducir estos efectos es necesario darle cuerpo un aporte de la proteína.

Por lo tanto, una opción natural para quienes buscan reducir el impacto por el paso del tiempo es la cáscara de piña, de acuerdo con los expertos, este componente de la fruta promueve la producción de colágeno lo que permite rellenar arrugas.

Entre otras bondades para la piel que tiene la cáscara de piña se encuentran su potencial para aclarar la piel, desvanecer manchas, unificar el tono natural, eliminar cicatrices como consecuencia de granitos y reduce el acné.

¿Cómo usar la cáscara de piña?

Para utilizarlas y obtener todos sus beneficios, es necesario sumergir las cáscaras de piña en un litro de agua y guardar en el refrigerador por dos horas. Posteriormente hay que proceder a lavar la cara con este líquido y al terminar hay que colocar una toalla húmeda con agua fría en el rostro; se debe reposar por 10 minutos y luego proceder a enjugar, también con agua fría.

Es importante señalar que antes de realizar cualquier tipo de procedimiento aún se trate de ingredientes naturales siempre es importante consultar con un especialista, quien podrá establecer lo mejor según el caso de cada persona.

AG