El particular motivo por el que los gatos tricolores son en su mayoría hembras

Los gatos son de las más mascotas más elegidas por millones de personas alrededor del mundo. Dentro de la amplia variedad que existe de este femenino podemos destacar a aquellos de fisionomía tricolor, que son a menudo llamados gatos calico. Los mismos son una maravillosa manifestación de la variabilidad genética y de color, que cuentan con un pelaje compuesto de tres colores distintos, generalmente blanco, negro y naranja, que los hace únicos y fácilmente reconocibles.

Sin embargo, debemos informar que lo que hace aún más intrigante a esta especie es que, en su gran mayoría, son hembras. Dicha rareza tiene sus raíces en la genética felina, específicamente en la forma en que se heredan los colores del pelaje.

Es por ello que los gatos tricolores, con su combinación de colores blanco, negro y naranja, son un ejemplo impresionante de la diversidad genética dentro de la población felina. Sin embargo, hay que decir que el gen que controla el color del pelaje en los gatos se encuentra en el cromosoma X. Los gatos tienen dos cromosomas sexuales, XX para las hembras y XY para los machos. Ahora bien, los colores del pelaje en los gatos están determinados por varios alelos de genes ubicados en el cromosoma X.

Por si no lo saben, el alelo responsable del pelaje naranja es recesivo en relación con el alelo del pelaje negro, y ambos son dominantes sobre el alelo del pelaje blanco. Esto significa que un gato necesita dos copias del alelo naranja para mostrar pelaje naranja, mientras que solo necesita una copia del alelo negro para mostrar pelaje negro.

Por lo tanto, si un gato macho hereda el cromosoma X con el alelo naranja, será de pelaje naranja, y si hereda el cromosoma X con el alelo negro, será de pelaje negro. No puede tener ambos colores en su pelaje, a menos que exista una rara mutación genética, como en el caso de los gatos "mosaico", una excepción a esta regla y pueden mostrar ambos colores. Los gatos tricolores, además de su singular genética, a menudo presentan patrones únicos en su pelaje que varían de un gato a otro.