Dile adiós a las ollas: conoce el revolucionario invento que las reemplaza y no necesita de gas ni fuego

Entre los utensilios de cocina más populares en todo el mundo, destacamos a las ollas. De hecho, seguramente hoy vas a ocupar una para cocinar vegetales u otras comidas. Pero este producto casi ancestral está llegando a su fin a causa de un revolucionario invento que las reemplaza y cada vez gana más adeptos en Latinoamérica.

El producto del que te hablaremos prescinde del gas y del fuego, por lo que al usarlo para cocinar no necesitaremos estar pendientes de la cocina o estufa, de que se queme la comida o de que el agua se consuma. Además, este revolucionario invento trae un amplio abanico de ventajas.

¿Cuál es el invento que sustituye a las ollas tradicionales?

Estamos hablando de la olla de cocción lenta digital, un revolucionario invento que facilita el proceso para hervir alimentos. De hecho, se caracteriza por ser muy fácil de limpiar y lavar, como así también de usar.

Por ejemplo, el sustituto de las ollas tradicionales cuenta con un control de temperatura ajustable, el cual permite cocinar vegetales y carnes, por ejemplo, de manera uniforme, lo que hará que dejemos de ajustar el fuego de la cocina al momento de cocinar (una de las tareas más tediosas y riesgosas).

Además, se destaca la capacidad de la olla de cocción lenta digital, la cual es mayor a la que tienen generalmente las ollas tradicionales, siendo desde los 3,5 litros y en algunos modelos encontrando hasta 6 u 8 litros, permitiéndonos así cocinar en grandes cantidades, para almorzar, cenar y también refrigerar.

Luego del uso, es momento de limpiar, algo que todos queremos evitar pero que con este revolucionario invento no postergaremos y lo haremos de inmediato. Recordemos que las tradicionales ollas acumulan suciedad difícil de eliminar, especialmente grasas de las carnes. Pero la olla de cocción lenta digital trae un sector desmontable que permite la limpieza en pocos minutos, sin necesidad de desarmar nada más.

La única desventaja que trae este revolucionario invento radica en que no se puede llenar en su totalidad, algo que sí solemos hacer con la olla tradicional. El artefacto digital se debe ocupar en un 60 o 70% de su capacidad, para que el calor circule de manera adecuada y la cocción sea uniforme.