El superalimento que regula tu estado de ánimo, estimula la producción de dopamina y cuida del cerebro

Gozar de una buena salud depende de infinitos cuidados que debemos tener. Uno de los más importantes pasa por la dieta que respetamos y el tipo de alimento que debemos consumir. En este caso, te hablaremos de un superalimento con importantes beneficios para el plano cognitivo. Se trata de uno de los más populares, que podemos encontrar en todas las tiendas y que su ingesta nos genera placer y hasta felicidad.

¿Cuál es el superalimento que beneficia al cerebro?

Estamos hablando del queso. Un superalimento que trascendió todo tipo de barreras, incluso las temporales, ya que los primeros quesos surgieron en el Neolítico, cuando el ser humano aprendió a domesticar a los animales, entre los años 8.000 a.C y el 3.000 a.C.

Profesionales indican que el queso actúa en el cerebro gracias a dos aminoácidos presentes en su composición: el triptófano y la tirosina. El triptófano es un precursor de la serotonina, un neurotransmisor que regula el estado de ánimo, por ende, su ingesta ayuda al bienestar emocional. Mientras que, por otro lado, la tirosina estimula la producción de dopamina, es decir, la hormona del placer.

¿Qué tipos de quesos son los mejores para la salud?

Investigaciones detallan que el queso en feta y el cheddar tienen un efecto positivo en la memoria y la función cognitiva en adultos mayores. Estudios demostraron que los adultos mayores que consumían regularmente estas variedades de queso experimentaban una mejoría en su rendimiento cerebral.

¿Cómo elegir un buen queso?

Para aprovechar todos los beneficios, es importante evitar quesos ultraprocesados, ya que carecen de nutrientes y su impacto favorable en la salud será ínfimo. Por su parte, los quesos frescos y artesanales, como el feta, elaborado con leche de oveja o cabra, suelen ser mejores opciones que los procesados.

Además, debemos prestar atención a cómo nuestro cuerpo responde al consumo de ciertos tipos de queso. Si manifestamos problemas digestivos, especialmente con aquellos ricos en lactosa, es posible que esto esté afectando también nuestra salud cerebral.