Ciencia y belleza
Toma asiento antes de conocer lo que descubrieron científicos argentinos respecto a las lámparas de secado
Un nuevo estudio revela cómo la exposición frecuente a lámparas de manicura altera moléculas clave en la piel. Uñas perfectas, pero ¿a qué costo para tu salud?.
La manicura semipermanente se ha convertido en una de las tendencias más populares entre quienes buscan uñas prolijas y duraderas. Sin embargo, un reciente hallazgo científico podría cambiar la forma en que vemos esta práctica estética tan común.
Qué descubrieron los científicos sobre las lámparas de manicura
Investigadores del CONICET, en Argentina, confirmaron que las lámparas utilizadas para secar esmaltes de uñas modifican químicamente moléculas presentes en la piel, entre ellas la enzima que produce melanina, un componente clave en la protección contra los rayos solares.
El estudio comprobó que tras solo 4 minutos de exposición, similares a los de una sesión de manicura, se producen alteraciones que afectan funciones biológicas esenciales. Estas modificaciones son comparables a las provocadas por la radiación solar en su punto más alto del día.
La investigación se centró en los efectos de la radiación ultravioleta emitida por estos dispositivos. Aunque muchas lámparas actuales emplean luz LED UVA —considerada menos dañina que las antiguas—, los resultados demostraron que los riesgos persisten, especialmente cuando el uso es frecuente y sin medidas de protección.
Manicura semanal y riesgos invisibles
Todo comenzó cuando una científica notó el impecable esmaltado de sus alumnas, quienes confesaron hacerse la manicura semanalmente en casa con kits económicos. El hábito frecuente y la intensidad de las lámparas generaron inquietud en la comunidad científica.
“El problema no es sólo la tecnología, sino su uso indiscriminado”, advierten los especialistas. Las pruebas demostraron que la exposición induce procesos de fototoxicidad, causando irritación, hipersensibilidad y, en el largo plazo, un potencial aumento del riesgo de cáncer de piel.
Entre las moléculas afectadas figura la tirosinasa, una enzima vital en la producción de melanina. Al alterarse, el cuerpo pierde parte de su capacidad natural de defensa frente a la radiación, abriendo la puerta a múltiples consecuencias para la salud dérmica.
¿Cómo protegerse si hacés manicura?
Los expertos sugieren que, si bien no es necesario abandonar por completo la manicura semipermanente, sí es importante tomar precauciones para reducir los daños. Algunas de las recomendaciones incluyen:
- Aplicar protector solar en las manos antes del uso de lámparas.
- Utilizar guantes especiales que cubran la piel pero dejen expuestas las uñas.
- Limitar la frecuencia de las sesiones con lámpara.
- Elegir salones que usen tecnologías más seguras y estén informados sobre estos estudios.
“La clave está en el uso responsable y con información”, concluyen los investigadores. A medida que la ciencia avanza, también lo deben hacer las prácticas de belleza, adaptándose a los nuevos conocimientos sin sacrificar la salud.
