Adiós a prestigioso colegio: su lugar será ocupado por un millonario negocio en Bogotá

La ciudad de Bogotá planea grandes cambios en su estructura y en los últimos días se conoció una noticia que lo cambiará todo, ya que el tradicional colegio católico Nuestra Señora de Chiquinquirá, en el barrio Chapinero de Bogotá, se convertirá en una de las discotecas más grandes de la capital colombiana, trayendo así un millonario negocio en uno de los espacios en desuso más requerido en el mercado inmobiliario.  

El cambio se trata de un proyecto que transformará el edificio en Kínder, un centro de entretenimiento nocturno que promete ser un referente en la ciudad. Recordemos que el colegio ubicado en dicha localidad dejó de funcionar como institución educativa hace varios años tras detectar deterioro en su infraestructura, y desde entonces pasó por diferentes usos, incluido un parqueadero que no tuvo éxito.  

¿Cuáles serán los detalles de esta nueva construcción? 

Según Red+, este proyecto es liderado por los creadores de Ghetto Bar y el desaparecido Kaputt Club y contará con más de 4,000 metros cuadrados, distribuidos en cinco pisos, que ofrecerán diversos ambientes musicales, un salón de conciertos y una galería multimedia, que enriquecerá a la ciudad de Bogotá.

Hay que decir que su remodelación, que costó más de 6,000 millones de pesos, incorpora un enfoque sostenible mediante el uso de más de 200 toneladas de materiales reciclados, como chatarra. Además, el plan busca representar la diversidad cultural de Bogotá y ofrecer un espacio para que los ciudadanos vivan la intensidad de la vida nocturna, en una transformación que ha generado sorpresa en la comunidad de Chapinero, quienes durante años vieron cómo el edificio se deterioraba.  

Eso sí, hay que decir que el regreso de una discoteca en manos de los creadores de Kaputt ha sido bien recibido en las redes sociales, donde muchos celebran la apertura de Kínder, que se espera para julio. Vale la pena recordar que Kaputt Club cerró sus puertas a principios de noviembre de 2023 debido a las obras de construcción del metro de la ciudad, hecho que dejó un vacío enorme en la noche bogotana.