Te contamos dónde esconder el ojo turco en casa para atraer la fortuna, según el Feng Shui

El Feng Shui es un sistema de creencias chino que parte de la base de que los espacios necesitan ser armonizados para, de esa manera, generar una dosis extra de fortuna a la hora de atraer la abundancia y la prosperidad. Dentro de esta práctica, hay determinados objetos que son fundamentales para cumplir dicho objetivo.

Sin lugar a dudas, el ojo turco es uno de ellos. Se cree que este objeto tiene grandes propiedades que nos protegen de las malas energías, malos deseos y de la envidia que puede ser dirigida hacia nosotros. Es por eso que no es raro verlo en collares, pulseras u otro tipo de accesorios.

Este amuleto puede ser utilizado de distintas maneras para poder cumplir con su cometido. Los especialistas tienen una serie de recomendaciones para poder exprimir al máximo todas sus propiedades y misterios que tan beneficiosos son para nuestra vida.

El Feng Shui postula que, para usar un ojo turco a modo de accesorio, este tiene que estar en perfectas condiciones. De la misma manera, la recomendación es no colgarlo en la cama porque su intensa energía puede interferir con el descanso. Otra recomendación es orientarlos siempre hacia el exterior para que pueda observar cualquier mal o mala energía que se aproxime.

Hay un lugar de la casa que es ideal para colocar un ojo turco y llamar a la prosperidad. Ubicarlo en la puerta de entrada es una excelente idea para protegernos de cualquier mal que quiera ingresar hacia nuestro espacio personal. Una segunda ubicación recomendada es la de las ventanas para que puedan vigilar el afuera y cuidarnos en todo momento.