Mascotas

Conoce cuáles son las razas de gatos prohibidas en el mundo

Si bien hay personas que prefieren a los gatos como mascotas, existen ciertas especies que no pueden estar en el hogar por diversas razones.
martes, 23 de abril de 2024 · 10:43

Los gatos se han convertido en las mascotas preferidas de millones de hogares en el mundo, quitándole el lugar que tradicionalmente le correspondía a los perros en muchos casos. No obstante, a pesar de que los felinos ganan cada vez más terreno, lo cierto es que hay algunas razas que están prohibidas en varios países, lo cual responde a diferentes motivos.

¿Qué razas de gatos están prohibidas en el mundo?

Existen algunas razas de mininos que bajo ninguna circunstancia pueden desarrollarse o crecer en casa. En Bélgica, por ejemplo, hay normas estrictas que indican claramente qué tipo de gatos están prohibidos.

De acuerdo con el Consejo de Bienestar animal del país europeo, gatos híbridos entre los que destaca el Bengalí o el Savannah no pueden ser criados y comercializados, ya que estas razas de felinos no son aptas para desarrollarse en cautiverio.

Imagen ilustrativa: Pixabay

Otro gato prohibido es el Scottish Fold, el cual según los especialistas, debido a la forma que tienen sus orejas, padecen fuertes dolores. Se trata de un defecto genético que ahora impide comprar, criar o mantener a esta clase de gatos en casa.

Poseer gatos salvajes es un acto prohibido en España. Estos felinos por lo regular se crían en cautiverio para ser comercializados como animales exóticos, así que debido a su naturaleza tienden a mostrar una actitud impredecible que no los habilita para crecer en un hogar.

Imagen ilustrativa: Pixabay

Como ejemplo de lo anterior, el Caracal es una raza que por su origen salvaje lo convierte en felino prohibido como mascota en España, aun cuando esta especie, originaria de África, Medio Oriente y Asia, se puede adaptar a diferentes entornos. Sin embargo su comportamiento volátil y el hecho de que requieran de cuidados especiales, lo hace quedar descartado como animal doméstico.

Cabe mencionar que las normas sobre la posesión de gatos y otros animales domésticos pueden variar significativamente de un país a otro, considerando las regulaciones locales, leyes de bienestar animal y políticas de vivienda, entre otras cosas.

AG

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