El abono casero rico en nutrientes que hará que tu limonero estalle de frutas

Para un óptimo crecimiento, el limonero necesita de tres nutrientes específicos, tal como lo cuentan expertos en jardinería. Se trata del potasio, el nitrógeno y el fósforo. Los mismos los puedes suministrar mediante un abono casero elaborado con un desecho de cocina que todos tenemos y que siempre termina en el cesto de basura. Si aplicas este método regularmente, verás cómo tienes una cosecha próspera desde tu árbol cítrico.

Se trata de las cáscaras de papa, rica en nutrientes y minerales, especialmente los mencionados anteriormente. En consecuencia, además del aporte de potasio, fósforo y nitrógeno, los cuales mejoran el suelo, promueven la formación de fruta y hacen que la especie sea resistente a enfermedades, también encontraremos otros compuestos que benefician significativamente a los limoneros.

¿Cómo preparar un abono casero para el limonero?

Aprovechar estos residuos orgánicos como abono casero resulta beneficioso para el limonero y también representa una opción ecológica y económica. Para realizar el truco de jardinería, primero tendremos que recolectar las cáscaras de papa, seleccionando aquellas frescas y limpias, evitando la introducción de bacterias o hongos en el suelo.

Es menester lavar bien las cáscaras para eliminar restos de tierra o químicos. Después, será momento de cortarlas en trozos pequeños para facilitar su descomposición y absorción en el suelo del limonero. Posteriormente, colocar las cáscaras alrededor de la base del árbol frutal, en una capa delgada.

Luego, cubre las cáscaras con una capa de tierra para evitar que se sequen o sean arrastradas por el viento. En esta línea, profesionales del rubro recomiendan no aplicar demasiadas cáscaras en una sola vez, debido a que una acumulación excesiva puede atraer plagas al limonero y hasta generar un desequilibrio en el suelo.

Aplicando este abono casero de cáscaras de papa cada tres semanas, notarás cómo el limonero exhibe muchas más frutas, grandes y jugosas. En otro orden de las palabras, tendrás una cosecha próspera.