La polémica continúa persiguiendo al Dalai Lama después de las imágenes que circularon en días recientes en donde se le ve al personaje con un pequeño niño, al cual obliga a darle un beso y después le pide que le succione la lengua como una especie de broma; ahora, dicho niño ha hablado con los medios de comunicación tras lo sucedido.

Fue a través de un video de Youtube difundido por la página de internet Voice of Tibet www.vot.org en donde se ve al mencionado niño hablar sobre la experiencia que tuvo junto al Dalai Lama, Tenzin Gyatso.

“Fue una experiencia maravillosa conocer a su santidad, a una persona con una gran energía y cuando recibes esa gran energía te sientes feliz”, explica el menor de edad, quien no hace comentario negativo alguno a lo vivido con dicho personaje.

Mismos comentarios que replica la doctora Payal Kanodia, la cual tiene un cargo importante en la Fundación M3M; en cuanto a su experiencia, se limitón a agradecer las bediciones que su santidad trae consigo.

“Tuvimos esta oportunidad de estar con su santidad y más con mi familia y estudiantes presentes, estoy totalmente agradecida por las enseñanzas que nos dejó sobre la paz, no puedo expresar cómo me siento de bendecida por sus palabras”, expresó Kanodia al mismo medio en Youtube.

Dalai Lama pidió disculpas

Días después de los hechos, y tras las críticas recibidas por parte de diversos medios de comunicación, usuarios de redes sociales, y varias personas en general por la manera en que se comportó el Dalai Lama con el menor de edad, un representante del monje emitió un comunicado en redes sociaes para pedir disculpas.

“Su santidad desea pedir disculpas al niño y a su familia, así como a sus muchos amigos de todo el mundo, por cualquier dolor que sus palabras hayan podido causar”, reza el comunicado.

Antecedentes en con los monjes budistas

Esta no es la primer ocasión en la que el Dalai Lama, ya que en el 2018 varias personas pertenecientes a la religión budista denunciaron de igual manera este tipo de actos. 

Varias personas expresaron que en los templos europeos los monjes budistas se aprovecharon de ellos de distintas maneras, ya sea que  les sacaban dinero y los sometían a maltrato psicológico, o bien se trataba de abuso sexual. Entre estas víctimas también se tenían menores de edad.

JAP