Salarios

Toma asiento antes de conocer cuánto gana un guardián del INPEC en Colombia

Conoce el salario y los beneficios que reciben los guardianes del INPEC, quienes tienen una de las responsabilidades más exigentes en el país.
martes, 24 de septiembre de 2024 · 19:11

Ser guardián del INPEC en Colombia es una profesión de gran responsabilidad, ya que involucra custodiar a los internos en centros penitenciarios. Este trabajo no solo exige un alto compromiso, sino que también ofrece salarios competitivos.

Según el decreto 0301 de 2024, un guardián del INPEC recibe un sueldo base mensual de 1.5 salarios mínimos, lo que equivale a 1'950.000 pesos.

Además del sueldo base, los guardianes reciben sobresueldos que varían según su rango. Por ejemplo, un dragoneante puede recibir un sobresueldo de 1'056.470 pesos, elevando su ingreso mensual a más de 3 millones de pesos. Estos sobresueldos buscan mejorar el rendimiento de los empleados en sus funciones.

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Posted by INPEC Colombia on Monday, April 18, 2022

Beneficios adicionales

Además de los sueldos, los empleados del INPEC cuentan con beneficios en salud, pensión y acceso a cajas de compensación. Esto convierte la carrera de guardián en una opción atractiva, a pesar de los riesgos que implica. El trabajo requiere gran preparación y habilidad para manejar situaciones complejas dentro de los centros de reclusión.

Requisitos para ser guardián del INPEC

Para ser parte del INPEC, es necesario cumplir con varios requisitos. Los postulantes deben ser colombianos, tener entre 18 y 24 años, ser bachilleres, y estar registrados en el sistema fénix del Ejército Nacional. Además, deben superar un riguroso proceso de selección realizado en centros de instrucción del país.

Los guardianes del INPEC también participan en programas de rehabilitación. Crédito INPEC

Responsabilidades del guardián del INPEC

Más allá de la simple vigilancia, los guardianes tienen la tarea de garantizar el orden y la seguridad en los centros penitenciarios. Asimismo, colaboran en actividades educativas y de rehabilitación para los internos, fomentando su reintegración social. Este rol integral es crucial para el funcionamiento de los establecimientos de reclusión.