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Adiós licencia de conducción: este es el requisito que deberán cumplir los conductores colombianos
La medida afecta a personas que consumen diversos medicamentos.El Ministerio de Transporte ha emitido una alerta en las últimas horas que podría afectar a miles de conductores en todo el país. De acuerdo con el nuevo comunicado, aquellas personas que consuman determinados medicamentos con efectos sobre el sistema nervioso central no podrán renovar automáticamente su licencia de conducción sin antes pasar por una evaluación médica especializada que los declare aptos para comandar un vehículo.
Se trata de una medida que busca incrementar la seguridad vial al reducir el número de conductores que manejan bajo los efectos de sustancias que alteran sus capacidades psicomotrices y de reacción, ya que los índices de siniestros viales preocupan a toda la población de Colombia.

¿A quiénes afectan la nueva medida relacionada con la licencia de conducir?
Hay que decir que los principales afectados por la renovación de la licencia de conducción son aquellos conductores que están en tratamiento con insulina, un medicamento que es esencial para personas con diabetes tipo 1 y algunos casos de tipo 2. En ese sentido, podemos decir que el uso de insulina puede provocar episodios de hipoglucemia (baja de azúcar en sangre), lo que puede causar pérdida de conciencia, confusión, visión borrosa, temblores y disminución de los reflejos, condiciones incompatibles con una conducción segura.

¿Cuáles son los medicamentos que pueden afectar la renovación de la licencia?
- Insulina: por el riesgo de hipoglucemia que puede causar pérdida de conciencia y reflejos lentos.
- Benzodiacepinas: utilizadas como tranquilizantes y ansiolíticos, que pueden causar sedación, somnolencia y disminución de los reflejos.
- Antidepresivos: pueden inducir somnolencia, afectar la concentración y disminuir la capacidad de reacción.
- Hipnóticos y sedantes: se trata de medicamentos para dormir que pueden provocar somnolencia residual y lentitud psicomotriz.
- Antihistamínicos de primera generación: usados para alergias, que pueden causar somnolencia, visión borrosa y disminución del estado de alerta.
- Analgésicos opioides: como la codeína, morfina, tramadol, entre otros, que pueden causar euforia, sedación y dificultad de concentración.
- Relajantes musculares: medicamentos que pueden provocar somnolencia y debilidad muscular, afectando la capacidad de respuesta.
- Antiepilépticos: medicamentos que pueden causar ataxia, sedación y alteraciones cognitivas.
- Antiparkinsonianos y antiespasmódicos: poseen efectos secundarios sobre el sistema nervioso central.
- Colirios y otros medicamentos oftálmicos: algunos remedios pueden afectar la visión y, por ende, la seguridad al conducir.
- Antineoplásicos e inmunomoduladores: por sus posibles efectos adversos sobre el sistema nervioso central.