Lengua española
Toma aire antes de descubrir si “emprestar” está mal dicho, según la RAE
La RAE tiene la respuesta definitiva sobre si el término “emprestar” es correcto o si debes evitarlo para expresarte de manera adecuada.En ocasiones, escuchamos términos que suenan extraños o incorrectos, lo que nos lleva a pensar que quien los usa está cometiendo un error. Sin embargo, en muchos casos, se trata de arcaísmos, palabras que fueron comunes en el pasado pero que con el tiempo dejaron de utilizarse. Este fenómeno no es un signo de ignorancia, sino parte de la evolución natural del lenguaje, donde algunas expresiones caen en desuso y otras emergen para ocupar su lugar.
Qué dice la RAE sobre los arcaísmos
La Real Academia Española (RAE) define los arcaísmos como palabras y expresiones que, aunque correctas, han quedado obsoletas en el habla cotidiana. Un claro ejemplo de esto es el término “emprestar”. Esta palabra comparte significado con “prestar”, que se define como “entregar algo a alguien para su uso temporal con la condición de ser devuelto”. Aunque “emprestar” era aceptado y utilizado ampliamente en el pasado, su uso ha disminuido con el tiempo, siendo desplazado por la forma más moderna y común: “prestar”.
¿Es incorrecto decir “emprestar”?
La respuesta de la RAE es clara: “emprestar” no es un término incorrecto. Sin embargo, debido a su desuso, puede sonar anticuado en la mayoría de los contextos actuales. En algunas regiones rurales de América Latina, la palabra todavía se escucha, lo que demuestra que no ha desaparecido por completo.
A pesar de esto, la recomendación oficial es utilizar “prestar”, ya que es la forma más reconocida y aceptada en el habla contemporánea. Optar por términos actualizados facilita la comunicación efectiva y evita confusiones.
¿Por qué es importante usar palabras modernas?
El idioma es una herramienta viva que se adapta a las necesidades de la sociedad. Utilizar términos vigentes, como “prestar”, proyecta una imagen profesional, moderna y clara.
Además, contribuye a mantener la unidad del lenguaje en los diferentes países hispanohablantes. Aunque los arcaísmos como “emprestar” pueden tener un valor histórico o cultural, en el día a día, es preferible recurrir a las palabras aceptadas por la mayoría.