Las 3 formas de identificar a una mala persona, según la psicología

Las personas suelen tener costados alegres como más oscuros, pero eso representan cualidades innatas en el ser humano. Lo cierto es que estas cuestiones distan de lo que representa ser una mala persona. Hay que decir que identificar ciertos comportamientos resulta imprescindible, ya que esto podría delatar a una mala persona.

En ese sentido, la psicología nos brinda señales determinantes y que no siempre son obvia a la hora de representar una personalidad tóxica. Este suele tener raíces profundas, como lo son las experiencias traumáticas o un pasado complicado, pero esto no lo hace para nada aceptable, debido a que identificar estas señales a tiempo nos permite tomar decisiones a la hora de relacionarnos con los demás.

Los 3 comportamientos de una persona tóxica

Manipulación: las personas a la que identificamos como tóxicas a menudo son manipuladoras, ya que son hábiles a la hora de utilizar toda su inteligencia emocional para influir en los demás en su propio beneficio. Matt Abrahams, es profesor de comportamiento organizacional de la Universidad de Stanford, explicando a quienes tienen una alta inteligencia emocional ya que pueden ser muy persuasivos con sus afectos.

Invalidan tus sentimientos: estas personas podrían realizar ciertos comentarios como "estás siendo demasiado sensible" o "no es para tanto", los cuales son indicativos de alguien que no respeta tus sentimientos y que no están dispuesto a ver las cosas desde tu punto de vista. Esta invalidación emocional puede ser muy dañina y es una clara señal de que estás tratando con alguien tóxico. Para ello es fundamental la empatía para compartir los sentimientos de los demás. Sin embargo, lo tóxicos carecen de esta habilidad esencial a la hora de entender los sentimientos y reconocer la validez de estos. 

Siempre se victimizan: de acuerdo con la psicología, estas personas suelen mostrarse como víctimas perpetuas que culpan a los demás de los problemas que le suceden y rechazan cualquier tipo de responsabilidad por sus acciones. Lo cierto es que esta mentalidad de víctima perpetua les permite evitar la responsabilidad afectiva y proyectar sus problemas en los demás, creando así un ambiente de constante conflicto y negatividad.