Cómo eliminar las bacterias de los trapos de la cocina en solo 4 pasos

Los trapos de cocina pueden convertirse en un foco importante de bacterias si no se les da el tratamiento adecuado. Estos artículos son indispensables para realizar diversas actividades, como manipular alimentos o mantener limpias las superficies, de ahí que se conviertan en el lugar propicio para el desarrollo de microorganismos.

El hecho de no lavar adecuadamente los trapos y seguir utilizándolos en la cocina en malas condiciones, eleva el riesgo de padecer enfermedades debido al inevitable crecimiento de bacterias a causa de los alimentos y otros residuos que se van impregnando en la tela.

Elimina las bacterias de los trapos de cocina siguiendo estos pasos

Los trapos, en gran medida, son los encargado de mantener la higiene de la cocina, por ello, se les debe dar el cuidado pertinente. En ese sentido, lo primero que hay que considerar es lavarlos, sin embargo, cabe señalar que en cuanto a los trapos demasiado sucios resulta indispensable retirarles las manchas o residuos previo al lavado principal, en especial si se manipuló carne cruda o alimentos como el huevo. En este caso, lo recomendable es remojarlos en agua caliente antes de lavar.

El segundo paso es elegir un detergente destinado para remover grasa y con características bactericidas. De ser posible, lavar los trapos en agua caliente, pues el calor es eficaz para erradicar bacterias. Hay algunos trapos cuyas instrucciones sugieren lavarlos a temperaturas bajas, por ello es crucial leer las indicaciones de la etiqueta para no perjudicar la tela.

A la hora de llevar los trapos a la lavadora es recomendable seleccionar un ciclo con un enjugue extra para garantizar que no quede ningún residuo de detergente en los implementos de cocina. No es aconsejable utilizar suavizantes, pues estos productos pueden dejar remanentes que reducen la eficacia de los trapos para secar, además de que generan un ambiente propicio para el crecimiento de bacterias.

Por último, el secado es muy importante para evitar que las bacterias proliferen, por lo tanto, es fundamental secar los trapos al aire libre, de preferencia en un sitio soleado y donde circule el aire. En caso de utilizar secadora es indispensable utilizar un proceso de temperatura alto para garantizar que los trapos queden secos por completo.

AG