Cocina
Mermelada de albaricoque, aprende a hacer esta sencilla receta con solo 3 ingredientes
¿Llega la hora del desayuno y te gustaría tener un dulce acompañante para tus tostadas? Pues es tu día de suerte, ya que en esta nota te enseñaremos a preparar una deliciosa mermelada, sin la necesidad de salir de tu casa.
No creerás lo fácil que es preparar mermelada casera, desde la comodidad de tu casa, sin la necesidad de salir a comprar un producto costoso y con miles de agregados y azucares. La mermelada de albaricoque, será un endulzante perfectamente natural suave y afrutada para que arranques tu día de la mejor manera. Te invitamos a que continúes leyendo para enterarte como con tan solo 3 ingredientes y en simples pasos, podrás cocinarla.
Para empezar, necesitaremos los siguientes ingredientes:
- 1 kg de albaricoques frescos
- 750 g de azúcar integral de caña
- 1 cucharada de zumo de limón
Ahora que ya tenemos lo necesario, pasamos a la etapa de preparación
Paso 1: Lava bien los albaricoques bajo agua corriente. Luego, córtalos por la mitad y quita los huesos. Puedes optar por dejar la piel o retirarla según tu preferencia. Si decides retirarla, simplemente pela los albaricoques antes de cortarlos en trozos pequeños.
Paso 2: Coloca los albaricoques troceados en una olla grande. Cocina a fuego medio-bajo, removiendo ocasionalmente, hasta que los albaricoques estén completamente blandos y comiencen a deshacerse. Esto puede tardar unos 10-15 minutos. Si prefieres una mermelada más suave, puedes usar un pasapuré para hacer un puré más fino.
Paso 3: Una vez que los albaricoques estén cocidos, añade el azúcar integral de caña y la cucharada de zumo de limón a la olla. Revuelve bien para que el azúcar se disuelva completamente. Cocina a fuego medio, removiendo frecuentemente, hasta que la mezcla espese y adquiera una textura gelatinosa. Esto puede tomar entre 20 y 30 minutos.
Paso 4: Para comprobar si la mermelada está lista, coloca una pequeña cantidad en un plato frío y deja enfriar durante unos minutos. Luego, pasa un dedo por el centro de la mermelada; si la línea se mantiene sin que la mermelada se junte, está lista para envasar. Si no es así, sigue cocinando y prueba de nuevo después de unos minutos.
Paso 5: Mientras la mermelada aún está caliente, vierte en frascos de vidrio limpios y esterilizados. Cierra bien los frascos y déjalos enfriar completamente a temperatura ambiente. Una vez fríos, guarda en un lugar fresco y oscuro.
