Salud ósea

Cómo puedes evitar encogerte al envejecer, según Harvard

El envejecimiento provoca una disminución en la estatura debido a la pérdida de masa ósea. Aquí te mostramos cómo prevenirlo.
miércoles, 4 de septiembre de 2024 · 11:38

Con el envejecimiento, es común que las personas experimenten una reducción en su estatura. Según estudios de la Facultad de Medicina de Harvard, esto ocurre principalmente debido a la pérdida de masa ósea, un proceso que comienza antes de los 50 años. Este fenómeno, conocido como descomposición ósea, es más pronunciado en las mujeres, quienes pueden perder hasta cinco centímetros de estatura.

Factores que contribuyen al encogimiento

La desmineralización de los huesos y la deshidratación de los discos intervertebrales son factores clave en la pérdida de estatura. A medida que el cuerpo envejece, los huesos se vuelven más frágiles y los discos que actúan como amortiguadores entre las vértebras se encogen, lo que lleva a una curvatura en la postura y una reducción en la altura.

Mantener una salud ósea adecuada es esencial para evitar el encogimiento. Crédito: iStock

Consecuencias emocionales del encogimiento

Además de los efectos físicos, el encogimiento puede tener un impacto emocional significativo. Muchas personas mayores sienten frustración al ver cómo su estatura disminuye, lo que puede afectar su autoestima y calidad de vida. Este cambio puede ser un recordatorio constante de su vulnerabilidad y envejecimiento.

El encogimiento puede tener consecuencias emocionales en los adultos mayores. Crédito: iStock

Cómo prevenir la pérdida de estatura

Para minimizar la pérdida de estatura, es esencial mantener una buena salud ósea y muscular. Ejercicios como el levantamiento de pesas y el yoga pueden ayudar a fortalecer los huesos y mantener la densidad ósea. Además, una dieta rica en calcio y vitamina D, junto con una vida activa, puede ralentizar este proceso.

Aunque no se puede evitar completamente la pérdida de estatura, llevar un estilo de vida saludable y activo puede hacer una gran diferencia. Consultar regularmente a un profesional de la salud y mantener una postura adecuada son claves para un envejecimiento más saludable y con menos consecuencias físicas.