Curiosidades

Adiós chicles: se conoció el grave impacto en la salud que posee el chicle

Un estudio determinó que el chicle puede liberar partículas de microplásticos en la saliva.
domingo, 30 de marzo de 2025 · 16:45

El chicle o goma de mascar, se trata de una de las golosinas más comercializadas en el mundo, que muchas personas consumen de diversos tamaños, formas y texturas. En ese sentido, hay que decir que este producto comestible, que parece de los más inofensivos del mercado, puede llegar a ser sumamente nocivo para nuestro organismo, de acuerdo con un reciente estudio. 

Se trata de un informe elaborado por la Universidad de California, quien encontró un promedio de 100 partículas de microplásticos por cada gramo de chicle, y algunas muestras liberaron hasta 637 partículas por gramo. Según la investigación, los resultados presentaron estas particularidades: 

  • La goma de mascar libera microplásticos al masticarla. 
  • Hasta 3.000 partículas por pieza. 
  • Tanto gomas sintéticas como naturales liberan plásticos. 
  • La mayoría se suelta en los primeros 2 minutos. 
  • Polímeros comunes: polietileno, polipropileno, PET. 
  • Masticar más tiempo, mejor que cambiar de chicle. 
  • Riesgo potencial de ingestión de 30.000 microplásticos/año solo por chicle. 
  • Impacto ambiental si no se desecha correctamente. 

¿Qué son los microplásticos que poseen los chicles? 

Los microplásticos se encuentran en todas partes de nuestro cuerpo, en el aire, en los alimentos, en la ropa, y ahora también en algo tan cotidiano como el chicle. Fue la Universidad de California en Los Ángeles (UCLA) quien se encargó de develar que mascar chicle puede liberar cientos o miles de microplásticos directamente en la saliva, lo que abre una nueva vía de exposición a estos contaminantes invisibles. 

¿Qué determinó el estudio? 

Los investigadores analizaron cinco marcas de chicles sintéticos y cinco marcas de chicles naturales, que se encuentran disponibles comercialmente. Lo cierto es que para evitar variaciones en el proceso de masticado, una sola persona mascó cada muestra durante 4 minutos, recolectando saliva cada 30 segundos. En otro ensayo, el masticado se prolongó hasta 20 minutos para observar la liberación progresiva de partículas. 

El resultado fue clave, ya que, en promedio, se liberaron 100 microplásticos por gramo de chicle, y algunas piezas llegaron a liberar hasta 600 partículas por gramo. A su vez, los chicles considerados como “naturales” pueden contener y liberar plásticos durante el masticado, debido a ingredientes añadidos o contaminaciones cruzadas en su procesamiento. 

Por último, es preciso tener en cuenta el estudio solo detectó partículas de al menos 20 micrómetros, por lo que es probable que nanoplásticos más pequeños también se liberen pero no hayan sido detectados. Esto es preocupante, debido a que los nanoplásticos pueden atravesar barreras biológicas, como la pared intestinal o incluso la placenta. Además, el producto representa un problema ambiental, ya que un chicle arrojado al suelo puede liberar plásticos al entorno, contaminar suelos y llegar a cuerpos de agua, por lo que es importante que se analicen sus componentes de la mejor manera y se ofrezca una solución sostenible a futuro.